Leonardo da Vinci - Retrato de Ginevra Benci
- Detalles
- Marta Olmos
- Leonardo da Vinci obras de arte
Año hacia 1474-1476
Temple y óleo sobre tabla, 38,8 x 36,7 cm Washington, National Gallery of Art En el reverso, una cartela con el lema: "VIRTUTENI FORMA DECORAT"
En el siglo XIX esta tablita se encontraba en el palacio vienés de los príncipes de Liechtenstein; no fue adquirida por el museo estadounidense hasta 1967. Es muy probable que se le cortara un tercio por abajo, sufriendo la extirpación de la parte inferior del busto, con las manos sólo abocetadas. La mujer está representada en toda su diáfana claridad, digna de un pintor flamenco, con sus toques de luz en los rizos del cabello, delante de un enebro (en alusión al nombre de Ginevra) en marcado contraluz.
El artista, para extender mejor el color y dar vida a la epidermis, se ha valido de los dedos, dejando así en la tabla sus huellas dactilares. "Virtutem forma decorat", "la belleza adorna la virtud", es el lema inscrito en la cartela que ata la guirnalda, la cual destaca sobre un fondo de pórfido y está compuesta por tres plantas, enebro, laurel y palma. El conjunto está pintado en el reverso de la tabla y seguramente ha de ponerse en relación con la retratada.
Ginevra, nacida en 1457, era hija de Amerigo di Giovanni Benci y, con diecisiete años, la esposa de Luigi di Bernardo di Lapo Niccolini. Este retrato podría haber sido ejecutado precisamente con ocasión de la boda, celebrada el 15 de enero de 1474 (aunque, a decir verdad, la mujer aparenta más de diecisiete años). Según una hipótesis más reciente, por el contrario, la obra habría sido realizada a petición de Bernardo Bembo, embajador veneciano en Florencia en 1475 y 1478-1480, vinculado a Ginevra por una relación platónica hasta el punto de encargar a Cristoforo Landino y a Alessandro Braccesi unos versos a modo de loa de ese sentimiento. De este modo, las plantas y el pórfido pintados al reverso podrían aludir a la castidad y duración de este sentimiento amoroso.
Las relaciones de Leonardo con la familia Benci fueron intensas y duraderas; también el San Juan Bautista del Louvre se dice que fue realizado para un miembro de dicha familia, Giovanni Benci, y la Adoración de los Reyes de los Uffizi quedó sin terminar.