Dalí - Mujer tendida
- Detalles
- Marta Olmos
- Salvador Dalí obras de arte
1926
Oleo sobre tabla,
27 x 41 cm
Saint Petersburg, The Salvador Dalí Museum, ant. E. and A. Reynolds Morse Collection
Durante su primer viaje a París, en abril de 1926, Dalí visita a Pablo Picasso, cuya producción ya conocía bien, presentado por el pintor cubista de Granada Manuel Ángeles Ortiz, a quien le había presentado García Lorca. Al volver a casa pinta un grupo de obras al que daba la denominación común de “momento de las academias neocubistas”; este cuadro forma parte de ella. En el estudio, al parecer, Dalí tenía colgadas algunas reproducciones de obras de Picasso, entre ellas el óleo Dos mujeres corriendo por la playa (La carrera), de 1922, actualmente en el Museo Picasso de París.
Más que de simple influencia podemos hablar en este caso de un cuadro pintado al estilo de Picasso, tantos son los rasgos que lo recuerdan. La monumentalidad de la figura, construida por sólidas masas que parecen fundirse con la roca de debajo, toda cuya violencia absorben, es acentuada por el escorzo, que reduce la anatomía a una estructura geométrica en forma de estrella. El cuerpo, con las dos poderosas cúpulas de los senos, se convierte él mismo en paisaje.
La modelo fue también en este caso su hermana Ana María, a la que es posible identificar si nos fijamos en la sombra que el perfil del rostro proyecta sobre el brazo derecho de la figura. La nariz y los labios muestran el perfil de Ana María, bien conocido por fotografías y por numerosos dibujos y pinturas, sobre todo el Retrato de perfil con el vestido de color añil, del año anterior.
Del cuadro existe al menos un estudio a lápiz; figuras casi idénticas a ésta pueblan el cuadro contemporáneo Mujeres acostadas sobre la arena.
La obra fue expuesta a finales de 1926 en la segunda individual del artista, celebrada en la galería Dalmau de Barcelona.